Hablando de niños. Un apasionado recorrido por la crianza en la literatura, de Carlos González. Espasa 2019

Este no es un libro de literatura infantil, que es el tema principal de este blog, pero sí es un libro sobre literatura y sobre niños y creo que esto justifica la excepción que voy a hacer con esta reseña.

Hablando de niños ―cuyo subtítulo reza Un apasionado recorrido por la crianza en la literatura― es un libro sobre libros. Carlos González, que es pediatra de profesión, analiza y desmenuza delicadamente, entre otras, las novelas de Charles Dickens, las hermanas Brontë, Jane Austen o Alexandre Dumas (novelas que todos conocemos o hemos leído alguna vez) desde el punto de vista de la educación y, en muchas ocasiones, sorprendiendo al lector con aportaciones en las que (al menos esta lectora) no había reparado antes.

Con una elaboradísima clasificación por temas (apego, resiliencia, amor, perdón, valores, consejos no solicitados, muerte, lactancia…), González hace un recorrido por estas grandes novelas del siglo XIX y sus autores y autoras, trazando un sorprendente retrato del mundo de los niños en la literatura decimonónica y, por extensión, de la vida de la época. Analiza el modo en que se criaba a los hijos en el tiempo en el que esas obras fueron escritas/publicadas, teniendo en cuenta el contexto histórico-literario, el entorno familiar del autor o autora y siempre analizando el tema (o temas) bajo el que cada texto en concreto ha sido agrupado. Así, con un prodigioso ojo clínico, el doctor González analiza determinados fragmentos que describen cómo era, por ejemplo, la relación entre padres e hijos, la explotación laboral infantil o la muerte en las novelas de Dickens; la relación entre un padre adoptivo y su hija en Silas Marner (1861) de George Eliot o la renovada juventud que trae consigo el convertirse en abuelo en El arte de ser abuelo (1877) de Victor Hugo. Propone, por tanto, una relectura de clásicos desde el punto de vista de la crianza de los hijos, estableciendo una relación directa entre dos temas apasionantes, la literatura y la infancia, y nos brinda su propia visión de lo que la educación, la crianza y la relación con nuestros hijos en su opinión debería ser, partiendo de cómo era hace dos siglos.

Hablando de niños es un pequeño tesoro para los que amamos la literatura del siglo XIX y disfrutamos de cada aspecto de la educación de nuestros hijos. Es un brillante ensayo que muestra en todo momento una profunda admiración y respeto por la infancia y que contagia la pasión por la literatura, invitándonos a (re)leer los clásicos con otra perspectiva. Carlos González consigue un precioso equilibrio entre sus conocimientos médicos, su sabiduría como ávido lector y las emociones más humanas como padre, como abuelo y también como hijo. Apasionado es sin duda el mejor adjetivo para calificarlo.